Entre arena y mar

Era de noche y yo quise andar por algun lado un rato, a ver si pasaba algo interesante. Luego de atravesar un bosque y una que otra carretera donde a esa hora no pasaba ningun vehículo por lo que pude notar, llegué a una playa.
La luna brillaba sobre las aguas mientras las olas chocaban contra las pocas rocas y dejaban una estela sobre la arena, la cual se volvía humeda y fria.
Me quedé tan hipnotizada por este paisaje y me fuí hacia una roca donde me saqué mis largas botas atadas con lazos en zig zag y dejé junto a ellas mi maleta blanca con una rosa en medio hecha de oro y bordes ondulados hechos del mismo material que la rosa sobre la roca.
Luego me puse a caminar cerca de la orilla con el vestido que encontré en aquel palacio abandonado que nunca pude hacerlo mio.
Siempre me habían hipnotizado ese tipo de paisajes, alejados de la ciudad. Yo no sé como pero crecieron mis enredaderas desde donde empezé a recorrer la orilla hasta donde estaba caminando ahora, y miré un poco por el rabillo del ojo algo asombrada. Pero las rosas que crecieron en ellas perfumaban el ambiente y eso me agradó y seguí caminando.
Luego encontré una roca algo grande y me paré sobre ella y lyego sopló un viento fresco del norte que hizo bailar mis cabellos y el vestido que llevaba puesto, mas la cola de este. Yo cerré el ojo y mi rosa del otro lado del ojo se abrió un poco mas. Me sentía volar.

[Off: Vestido que lleva puesto:

Spoiler:

]

ya se hacia de nosche, en realidad se me paso la hora contemplado cada ola que rebentaba en la orilla del mar. Me encantaba sentir la brisa marina en mi cara. El viento hacia que mi larga cabellera se moviera, era una sensacion tan relajante que la hora pasaba volando. Me gustaban las caminatas nocturnas.

como era recien llegada a la ciudad decidi conocerla, y me anime ese dia a ir a la playa a pesar de ser de noche, mientras caminaba por la arena y me fije en una chica que estaba paraba en una roca, decidi acercarme a platicar con ella un rato. Tenia la mania de hablarle a todas las personas que se me cruzaran. Mientras me acercaba senti a otra persona caminando por el lugar...

Yo sonreí ante el paisaje y la brisa, mientras que un joven se me puso adelante mio. Yo le dediqué una sonrisa.
Me sentía tan bien que empezé a cantar una cancion con una voz dulce y melodiosa mientras le tomaba suavemente de la barbilla haciendo la ilusion de que tenía dos ojos verdes.
Esta vez me gustaba la compañia de alguien, puesto que venir aqui me relajó bastante.

La muchacha en la roca comenzo a cantar, me quede en mi lugar escuchando la linda cancion preguntandome que hacia sola y cantando...

El joven puso sus manos en mi cadera y luego alzó su mano izquierda para acomodarme mis cabellos.
-Aun me recuerdas Nadahel -dije con voz serena y dulce le dediqué una sonrisa-

Estaba algo suceptible ese dia asi que decidí jugar un poco.
-Espero que tus palabras sean ciertas, Nadahel-le dije con el gesto y la voz de antes aun

Hice una risita baja y sus manos de a poco subieron por mi cadera. No soy de las chicas que se intimidan ante unos toques. Me acerqé a su oid y como un leve susurro melodioso de una sirena le seguí cantando la cancion de antes.

-No sé si mi naturaleza sea jugar, pero...-me acerqué mas a su oido- solo sigo mis instintos -y me alejé un poco de su oido- mi sangre no te va a gustar -dije con un tono malicioso y solté una risa algo psicopata pero bajita en su oido-
Hice que una de mis enredaderas abrieran la herida de mi brazo con las espinas, otra trajo un pez del mar aun vivo y lo hice tomar mi sangre.
Sonreí macabramente cuando le hice tomar la sangre al pez el cual se deshizo como si se pudriera y luego se volvió polvo.
En eso le giré el rostro con mi mano para que viera el pez y en que se convertia.
-Seguro no te gustará-dije con una sonrisa algo maliciosa y con un tono inocente y algo burlon-

Solo ezbocé unas risas ante lo que me decía y seguí su ritmo del juego. Y mientras me movía agraciadamente como él me conducía me reí de maera melodiosa.
- Hay muchas cosas de mi que creo que te harán sentir mas interés, joven de la noche-le dije con un tono algo burlón y melodioso-

Seguíamos danzando entre la arena sin musica, yo me divertía mucho y sntía una sensación extraña puesto que despues de mucho tiempo danzaba con un joven y nunca con alguno como él.
[Off: me refiero, a lo vampirico xDu]

Al decirme aquello, solo le dediqué una sonrisa y noté que estabamos mas cercanos al mar. En un momento me sacudió hacia atrás y luego me levantó mas cerca de su cuerpo.
-Como usted diga, mi caballero -dije con voz melodiosa y reí bajito-
Luego, él desapareció entre murcialagos y se puso detrás de mi poniendo sus manos en mis hombros. En ese momento miré al cielo la luna, que estaba hermosa.
Esa noche me sentía muy relajada y con un acompañante muy peculiar.
- Esta noche es preciosa -dije aun mirando la luna y sonreí-

-Yo adoro este tipo de paisajes, me relajan... y las noches por aqui parecen ser siempre hermosas-dije dulcemente mientras cerraba mis parpados por unos segundos-
Me hubiera gustado estar un un ambiente así hace mucho tiempo, pero hoy es...hoy

-Yo tambien pienso que es algo asi, pero la eternidad es aburrida si no tienes con que divertirte-dije con un tono algo burlón y melancolico-

Yo tambien habia vivido mucho, pero siempre bagabundee por todos lados sin nada de que divertirme o mostrar un sonrisa de verdad. El joven apartó sus manos de mis hombros, luego miré por el rabillo del ojo y el estaba con la cabeza gacha con sus ojos cerrados a lo que yo suspiré. Una enrededara con una rosa se me acerco, yo la apreté y sus petalos salieron volando las cuales tomaron forma de mariposas, he de decir que ahi estaba la respuesta de mi accion.

Luego que liberará a mis mariposas, el joven se acercó a mi rostro desde la espalda para robarme un beso...como se atreve a robarmelo de esa forma? Pero luego dejé mis enojos para despues y él me preguntó algo susurrandome al oido.
-Porque lo pregunta, joven Nadahel?-dije con voz melodiosa-