Sol Devastado. [Privado]

Una sensacion de calor atrapo a diva, era una sensacion buena, haciendo que hasta ella se quede impresionada. Tanto por el enorme poder, como por el ambiente, era algo lleno de bondad.

Niña... entiendo el dolor y sufrimiento que has tenido. Entiendo que despues de tanto estes tan preocupada y no sepas que camino tomar, por desgracia ante ti no me puedo presentar, pero te dire mi nombre, mi nombre es Animus.
Quiero decirte, que esto sera dificil, pero es lo unico que tienes...

Los 10 grandes incluido yo y Cerberon, estabamos en una pose noble de reverencia, Admirabamos la actitud de esta persona que para nosotros era un dios, por su total poder, por su total conviccion en las palabras, por su forma de decir la verdad, por su misericordioso espiritu y mas que todo... por su infinita inteligencia y gran conocimientos de poder. Los guardias tambien adoptaron esa postura.

- ¡Que sea muy bienvenido REY DIOS ANIMUS! - Gritaron todos los integrantes de Sol Devastado.
- Muchisimas gracias hijos mios. - Dijo Animus. Y agrega. - Niña, te prometo que cuando todo pase, borraremos toda tu recompenza, tienes mi palabra, y juro jamas tomar alguna decicion que dañe a alguna persona.

Spoiler:

*Finalmente salió de su escondite y se acercó por detrás a ese señor misterioso que acababa de llegar.*
¿Rey Dios Animus?, Que extraño... *Pensó y solo se quedó mirándolo, luego desvió la mirada a Diva y dijo decidida.*
Haz lo que te dice, toma esa píldora, se menos caprichosa una vez en tu vida...
*Suspiró.*




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Note que había un aire tenso, me me vi del medio y me crucé de brazos.

- Tranquilos -arque una ceja- Si la llegará a tomar que sea el tiempo de ella. -moví mi cabeza sacar el largo flequillo entre mis ojos-.

Suspiré, y puse mis pies en forma de V al tener los brazos cruzados.

Miré frunciendo el seño de una manera graciosa , a Dei.
- ¡No soy caprichosa! , tu lo eres, señora escarabajo ~- Diciendo esto le saqué la lengua en tono de burla y rápidamente tomé la pildora y la tragué.
- Listo, ¿Ya puedo irme?- Dije cruzada de brazos.

me siento en algun lugar como y espero como es la raccion de Diva despues de las pastillas que le dio shallow-esto se pone bueno-dije mirando fijamente a Diva

Cerré los ojos un momento y traté de agarrarme el pecho, derrepente sentí y dolor fuertisimo que venía dentro de mi- ¡¡¡AAAAAAHHHHGGG!!!! - Solté un grito que se escuchaba aun fuera de las murallas, mis ojos se abrieron como platos, y me movía como si estubiera poseida.
-¡¡¡Basta, basta parenlo!!.!-Grité con todas mis fuerzas mienstras lloraba desesperadamente. Trataba de escapar de los brazos de Shallow a toda costa mientras me seguia moviendo desesperada. El recuerdo de toda la gente que maté me atormentaba el sufrimiento de la gente que no maté al ver a la demas gente muerta, las familias destrozadas, todo... lo podía sentir.

Ya termino el efecto de la pildora, su paga ya habia estado completa.

- Shallow, llevala hasta la salida, a partir de ahora dejara de ser buscada por todo el mundo, y podra vivir en paz. Dijo Cerberon.
Mi esencia habia desaparecido, pero ella seguia traumatizada, asi que trate de consolarla para que este bien, sabria que no me lo iba a perdonar, pero yo no queria seguir siendo su enemigo, no queria tener ese tipo de relacion.

- A partir de ahora, tu recompenza es de 0, es decir no eres buscada, pero, si seguis haciendo cosas malas, tu antigua recompenza se pondra en pie, pero esta vez no ira a buscarte Shallow, ira Snaix.
- Pero señor! Elegir a el no cree que es algo subito! Interrumpo de forma drastica.
- Y porque crees que elegirte a vos es bueno? Si bien sos de las personas que mas necesita la organizacion en cuanto a tu hibrida forma de pelear, con esta persona estuviste muchisimo tiempo.
- Snaix no daria ni siquiera un respiro, la mataria.
- Despues de esto, no creo que vuelva a hacer daño, sabes que esa pildora es lo mismo que el poder de el, simplemente que el de Snaix es 100 veces mas fuerte. Lamento tener que hacer esto, pero esta pastilla era mejor que el abismo y RIP.
- Lo se... disculpe, la acompañare a la puerta.

Entonces tomo a diva y la alzo, llendo para el gran porton. Iba con la cabeza gacha.

Lo abrazé mientras me llevaba.
-Gracias.
Dije y luego le sonreí, como si nada de esto hubiera pasado.

Quedé de pie, con los brazos cruzados y los ojos abiertos como platos.

- ¿Solo eso era? -fruncí el ceño-


Quizás de todo no era tan malo al final, lo de Diva. Por un lado aprendería, pero ella... es demasiado terca. Bajé la cabeza negando y dí un largo suspiro.

- Al final, estoy aquí como estatua. -dije en voz baja-

Cerberon da un salto y cae al lado de dei y saya. - Señor, ¿las mato? Dijo el poderoso esbirro, que oculta su atronadora fuerza.

- No, dejalos que se vallan, ademas estas personas no hicieron nada malo, lo puedo ver en sus corazones.


Yo ya habia llegado donde estaba el otro lado de la puerta, asi que baje a diva y la mire, posiblemente nos volvieramos a ver, pero estaba feliz de que esa proxima vez sea para divertirse o hablar.
- Bueno, yo tengo que volver a dentro, disculpa por el daño que te eh hecho, simplemente te queria ayudar... levanto un poco mi mano derecha y doy una sonrisa. ¿Amigos?

¿Matarme?... me quedé en silencio.
Y me vino a la mente la duda de como podrían matar a un Chiropteran, pero estás solo eran leves dudas que una que otra ves me habían venido a la cabeza.


- Aaah... -bostecé y levante mi rostro que estaba viendo hacia el suelo, vi a mi alrededor, pude notar detalles en la arquitectura y gente que me rodeaba. Sinceramente no les había prestado atención.

- Vaya -dije tranquila sin ninguna rara expresión-

Sonreí tiernamente aunque se veia algo escalofriante.
- Claro.
Dije y luego me abalancé abrazandolo, mientras miré sobre su hombro a Saya con ese extraño... hombre. ube un escalofrio.
-No le harán nada a mi hermanita... o si?

Abro los brazos y le doy un fuerte abrazo, del calor de una verdadera amistad, apretandola fuerte.
Perdi tanta gente, no voy a perder a nadie mas, no te preocupes, cerberon no puede hacer nada sin que Animus de la orden... Vos, prometeme que te vas a cuidar, y si vas a necesitar sangre, podes llamarme. Disculpa los problemas que te cause.

aparesco a un costado de un lugar-Hola Shallow-dije mientras miraba a todos los que estaba en este lugar-parece que entraron muchos aqui jeje-dije sacando mi pistola-alguno de estos es enemigo?-

-Todo esta bien, amigo Shallow.
Dije esbozando una hermoza sonrisa para luego volver a mi cara de preocupacion por Saya...
Sin decir palabra alguna me di la vuelta y caminé unos paso para luego ser envuelta en alguna clase de viento raro, para luego desaparecer en el, dejando solo una rosa azul en el camino.

Quedé cruzada de brazos unos varios tantos minutos. Al darme vuelta lo ultimo que vi de diva fue su imagen haciéndose borrosa, y desapareciendo.
Arqué una ceja y dejé caer el cansancio de mis brazos y los deje colgando cada uno de su lado. Y al aparecer un nuevo... chico, lo miré con curiosidad.

Suenan las trompetas, y los restante de los 10 picos salen a la luz para darle la bienvenida al decimo primer pico que iba a entrar.

- Vamos Zero, es la hora de tu iniciasion. Le digo despues de despedir a diva y ponerme la mascara.

Desde la parte de adentro, estaba todabia Cerberon hablando con Saya, cuando Snaix se mete en esa discucion.

- un kyroptero... hace cuanto que no como uno... Desprendiendo su larga lengua, era un demonio en persona.

-Dejala Snaix, ella si bien es una infiltrada, el señor dio la orden de que no le hagamos daño y la dejemos ir, y yo tambien lo digo.

-Oh... ya veo, ahora se le da por ser bueno... Dijo el demonio con una voz macabra, aunque sus intenciones eran reales, estaba cerberon, era imposible que haga algo.

hice una reberencia a Shallow y a los de los 10 picos-muchas gracias, esto es un honor para mi-dije haciendo un pequeña reberencia

No reaccioné hasta el momento que dijo 'comer'.

- Perdonen, con sumo respeto... -dije con toda delicadeza- Un caballero y/o dama Chiropteran, no es lo mismo que una reina. -finalicé luego de que el chico de cabellos grises acabara de hablar-.

No intentaba burlarme de nadie, pero siendo sincera parecería que yo era la que más sabía de mi especie.
Sentí incomodidad, pero eso era una mínima porción de como estaba en suma duda de que será de ahora en adelante aquí adentro.

Reina... Interesante... La lengua del demonio tocaba el suelo, y seguia creciendo mas y mas.


-Niña, mientras respetes la sangre no seras mi enemigo. Aparecio de la sombra Razor, una persona que su pensamiento, creencia y razon le da la biblia, una persona muy alta y robusta, con una biblia en la mano.

- Por cierto, ustedes dos... no tendrian que estar aca, por favor, les agradeceria que se fueran sin causar disturbios ni nada. Dice animus.


Fuera de ahi.

Gracias, pronto tu tambien seras reverenciado, ahora entremos zero. La magnitud de poder que tenian los 10 picos, era terriblemente alta, empezando con la terrible habilidad de el miembro mas debil Aosora hasta el abisal poder de Cerberon. Aunque zero demostraba mucho potencial.




(Off: Imagen de Snaix)

Spoiler:

Al escuchar a Snaix se quedó mirándolo algo seria por unos minutos, pero con ese toque en sus ojos, esa curiosidad y se dibujó una pequeña sonrisa en su rostro que desapareció al instante. Luego desvió la mirada a Saya y sonrió amablemente mientras se acercaba más a ella.
-A si que usted es la hermana de Diva!. Gusto en conocerla- E hizo una pequeña reverencia.




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Escuché 'niña' y reí tímidamente para mis adentros. Puse una mano sobre mi cintura y me crucé de piernas. E ignore al monstruo que, claro esta, me veía con destellos en los ojos y casi con u banquete adornado.

- Ojalá fuera una niña... -mi sonrisa era notable y negué con la cabeza- Sería aburrido irme... -dije suspirando-.

Levanté la vista porque una voz femenina me hablo, la miré de abajo hacia arriba con una curiosidad bastante grande.

- El gusto el es mio -baje la cabeza como forma de saludo y educación- ... si ella es mi hermana menor...

me aserque a la chica que le habia hablado Animus-por favor vallase, y si se quiere quedar que es lo que queiere aser aca?-

Giré y miré directamente a los ojos sin pestañear.

- Algo que hacer. -enarque una ceja- Ya que Diva ha 'cambiado', supongo que... mucho no me deja que hacer allí afuera. -dije para finalizar y el destello rojizo de mis ojos se hizo a la luz. Podía sentir que algo interesante se acercaba-.